La tensión vuelve a escalar entre la Gobernadora y la Rosada por los números de la provincia. LPO
María Eugenia Vidal y Sergio Massa mantuvieron este jueves un encuentro en el Four Seasons de Retiro como antesala de lo que será la negociación por el presupuesto de la provincia de Buenos Aires. La escenografía de la reunión fue la misma que eligieron años atrás, en una recordada foto que incomodó a la Casa Rosada que ve en Massa uno de sus adversarios más molestos.
La reunión sorprendió en las filas del Frente Renovador pero también en el universo de Cambiemos. Según trascendió, el encuentro sirvió a la gobernadora para enviar al gobierno nacional un mensaje de molestia por el ajuste que le impusieron a la provincia de Buenos Aires, que cargará por lejos con el recorte de gastos más grande.
En otras palabras, fue un mensaje que la Gobernadora decide enviar a la
Rosada en momentos en que la relación con Mauricio Macri se vuelve a
tensar debido a que la "compensación" que le ofrecen por el ajuste en la
provincia está muy por debajo de lo que Vidal esperaba.
En las
últimas semanas, la Gobernadora -mediante distintos off the record en
los dos diarios más importantes- transmitió distanciamientos y cercanías
con el Presidente, en un zigzag que revela las tensiones en curso.
A
mediados de octubre dejó trascender su decepción con el gobierno
nacional, principalmente con el Nicolás Dujovne, y filtró su malestar
por convertir a la provincia en la variable de ajuste del Gobierno.
Interna precoz
Dos
semanas más tarde, un sector de Cambiemos salió a plantear la idea de
que Vidal debería desdoblar las elecciones del año próximo en la
provincia de Buenos Aires. El argumento se basaba en que con las
elecciones simultáneas, Cambiemos pone en riesgo el gobierno del
distrito más importante del país. Y agregaban que en el territorio
bonaerense es donde reside el poder electoral de Cristina, quien por
estos días tiene mayor intención de voto que Macri.
Por esos
días, el ministro de Gobierno de Vidal, Joaquín De la Torre, salía en
soledad a defender a la Gobernadora y a romper con armonía que
exterioriza Cambiemos. De La Torre, de raíz peronista, apuntaba hacia
dos ministros de Macri: Rogelio Frigerio (Interior) y -en mayor medida- a
Dujovne (Economía).
El ministro de Gobierno bonaerense, Joaquín de la Torre.
Pero
esta semana hubo nuevos mensajes desde La Plata hacia la Rosada. "Estoy
jugada con Cambiemos y con el objetivo del equilibrio fiscal",
transmitió la Gobernadora en reuniones con periodistas para intentar
dejar atrás los roces y avanzar en una cifra "extra" (por fuera del
presupuesto nacional) que compense lo que la provincia perdió por el
ajuste.
Pero la cifra que Dujovne y Marcos Peña tiran sobre la
mesa estaría muy lejos de lo que la Gobernadora necesita para transitar
su último año de mandato. La tensión vuelve a escalar.
Esta
semana, Macri y Vidal se mostraron juntos en Trenque Lauquen. La foto
sirvió para mostrar distensión, pero en rigor el malestar no cedía. Lo
cierto es que más allá de las sonrisas en lo profundo del interior
bonaerense, la última vez que conversaron en serio sobre el impacto del
ajuste en la provincia fue la semana pasada en un almuerzo en la Rosada.
Fue una reunión cerrada a la que sólo se sumó Marcos Peña. De allí la
Gobernadora se fue con las manos vacías. "Haré lo posible", se limitó a
responderle Macri.
Vidal cree que le tocó la peor parte del ajuste y negocia atenuarlo vía Fondo del Conurbano
Vidal
escuchó del Presidente y del jefe de Gabinete que no habría novedades
hasta diciembre. Que recién ese mes podría haber una compensación por
decreto aunque tampoco eso era seguro.
Como trasfondo del
problema asoma la caída de Macri en las encuestas y las voces que
ponderan a Vidal como la mejor candidata de Cambiemos para la
presidencia. Eso ocurrió días atrás en un universo muy caro al gobierno:
el coloquio de Idea. LPO contó como la Gobernadora se alzaba como la
opción presidenciable para los empresarios que participaron del foro que
se realizó en Mar del Plata.
Los diputados massistas D´Onofrio, Gutiérrez y Bonelli.
Por
el lado de Massa, el líder del Frente Renovador aprovechó la invitación
para limar algunas asperezas con la Gobernadora, a la que había
presionado dejando trascender que se corría de la negociación del
presupuesto bonaerense y lo dejaba en manos de sus diputados Jorge
D'Onofrio y Valeria Arata, dos duros que anticipaban una negociación
endemoniada para Cambiemos.
Massa negocia dos ejes importantes:
uno es un proyecto de ley para que los intendentes puedan separar la
fecha de la elección de los comicios presidenciales y provinciales y
presidencial. El otro es una serie de cargos que corresponden a la
oposición.
Massa incomoda a Vidal con un proyecto para separar las elecciones de los intendentes
Existen
dos textos sobre el desdoblamiento de las elecciones municipales en
Diputados y Massa exige que se fusionen y se aprueben antes de la
votación del presupuesto. Fuentes de la Legislatura aseguran que si hay
acuerdo eso podría lograrse en noviembre y a mediados de diciembre votar
el presupuesto 2019.
El texto, adelantado por LPO en junio,
faculta a los intendentes para anticipar y separar los comicios locales
de la elección provincial y nacional. Pero además, los habilita a elegir
el sistema de votación y el sistema de internas.
En Cambiemos no
quieren saber nada con la iniciativa de Massa. Temen que si Macri y
Vidal siguen bajando en las encuestas los alcaldes opten por separar las
elecciones como estrategia para retener sus distritos.
Según
pudo saber este medio, Vidal le pidió a Massa precisiones sobre los
proyectos y se comprometió a darle una respuesta en los próximos días.
Presupuesto: Vidal ofrecerá lugares en el Bapro y el Tribunal de Cuentas a Massa y el PJ
El
otro punto en los que había tensiones tiene que ver con los cargos en
los organismos de control en los que tiene que haber espacios para la
oposición. Hay vacantes en organismos como el poderoso Tribunal de
Cuentas y también -aunque en menor peso político- en el directorio del
Banco Provincia.
Desde La Plata sostienen que una silla en el
Tribunal de Cuentas será para el Frente Renovador y otra para el bloque
que responde a los intendentes y que encabeza Martín Insaurralde. En
tanto, el mismo esquema de reparto se hará con el directorio del Banco
Provincia.
La semana pasada, Massa había enviado un mensaje de
distanciamiento a la Gobernadora cuando dejó trascender que él tomaría
distancia de la negociación por el presupuesto y empoderaba a sus
legisladores para discutir los puntos del presupuesto.
Para los
negociadores de Vidal, eso significaba un problema. Discutir un proyecto
de múltiples aristas como es el presupuesto con cinco legisladores no
asomaba como una tarea fácil.
Pero el llamado de Vidal a Massa
para la reunión de hoy sorprendió incluso dentro del Frente Renovador,
donde los legisladores se preparaban para arrancar la negociación por el
presupuesto.