
-Concretamente, ¿Fue la Policía la que le tiró gas pimienta a la nena de diez años está siendo viralizada?
-No.
-¿Confirma esto?
-Exactamente.
El
 diálogo que figura en las primeras líneas de este texto se desgrabó 
textual de una entrevista que ocurrió en el prime time de un canal de 
televisión. El programa en cuestión se denomina ¿La ves? y hasta allí 
fue invitada Alejandra Monteoliva, secretaria de Seguridad y mano 
derecha (cuál sino) de la ministra Patricia Bullrich. Sentada en el 
piso, mirando a cámara, la funcionaria descarta la posibilidad de que la
 Policía le haya arrojado un químico compuesto mayoritariamente por 
capsaicina -que produce irritación instantánea- a una nena que estaba en
 las inmediaciones del Congreso Nacional el día que el oficialismo no 
quiso aumentarle 13 mil pesos a una jubilación mínima que no llega a 240
 mil pesos por mes. En los segundos siguientes, ante una pregunta del 
periodista Manuel Jove sobre cómo se puede confirmar quién roció con ese
 alcaloide en medio de una multitud, Monteoliva titubea un instante, 
apenas un instante, para luego darle seguridad a su relato. Sus ojos 
achinados miran a cámara -y no al panel que está en el mismo estudio- y 
de su boca salen dos argumentos para reafirmar su posición: dice que no 
había policías en ese momento y que fue "un gas que arrojaron esas 
personas". ¿A quiénes se refieren? La funcionaria -que participó del 
"Modelo Bukele", según promocionó Bullrich al momento de la designación-
 cuenta con la complicidad de que en la transmisión se pase en loop un 
video, filmado desde un plano picado, en el que no hay claridad más que 
la edición de un círculo rojo que acompaña el desplazamiento de una 
figura ¿anaranjada? que camina hasta chocarse con un tumulto de 
personas. Cuadro siguiente, un humo, también naranja, perfectamente 
distinguible, es en el que se apoya Monteoliva para reafirmar que ése 
fue el picante que hizo arder los ojos de la pequeña víctima. 
Monteoliva, quien antes de acompañar a Bullrich fue ministra de 
Seguridad en Córdoba hasta el levantamiento policial de 2013 que marcó a
 fuego la provincia, aclara que en ese circulito rojo, la figura que se 
distingue "es la de una mujer". Eso sí, añade, todavía no se le puede 
poner cara, nombre y apellido.  Y esta misma funcionaria, que en la ONG 
que regentea con fondos de Naciones Unidas -el Observatorio de Seguridad
 Ciudadana- se aclara que es necesario "comunicar información oportuna, 
relevante y de calidad" sobre delitos y violencias, dice en vivo que es 
cuestión de tiempo para que se conozca quienes "ejercieron actos de 
violencia".
-Qué tremendo-, cierra la alocución el conductor televisivo.
Lo
 peor es que tenía razón la funcionaria. Horas más tarde, cuando 
Monteoliva ya había vuelto a su casa, se sacó el maquillaje, durmió en 
su cama, se despertó, se hizo el desayuno y viajó hasta la sede del 
Ministerio, en las redes sociales se filtró el video en el que se ve 
quién le tira el gas pimienta a una niña de 10 años. Eso sí, no hay una 
mujer con vestimenta anaranjada, ni circulitos rojos de una edición 
básica en Premiere. Es un policía de la Federal que aprieta el spray a 
centímetros de la víctima, tal y como se ve en la grabación de arriba.
Qué tremendo.

