En la reunión “se analizaron estrategias de integración productiva para
el desarrollo de diferentes ramas de la industria, como la automotriz,
siderúrgica, naval, aeronavegación; como así también en materia de
energía y comercio”, aseguró la cartera que dirige Kicillof.
Además
se acordó la utilización de un software en ambos idiomas, donde se
concentrarán todos los temas relacionados a asuntos políticos e
institucionales, asuntos económicos y comerciales y de cooperación
multilateral.
De esta manera, reunirán todos los ejes de la
integración entre ambos países, “con una permanente actualización, que
permitirá un seguimiento pormenorizado”.
En tanto, el nuevo
ministro de Economía del país, Joaquim Levy, asumió hoy su cargo y
anunció que el Gobierno buscará el próximo año una meta de superávit
fiscal del 1,2% del PBI y controlar la inflación para reactivar el débil
crecimiento.
"Vamos a trabajar con una meta de superávit fiscal
primario [ahorro para el pago de la deuda pública] de 1,2% del PBI para
2015, mientras que para 2016 y 2017 esta no será menor a 2%", dijo Levy
en una conferencia de prensa, tras ser nombrado como ministro de
Economía por Rousseff.
Esta mañana, antes de partir con destino a
Brasilia, Capitanich -en una conferencia de prensa brindada con
Kicillof- adelantó que durante la audiencia que iban a mantener con
funcionarios del vecino país iban a avanzar en el análisis sistemático
de la "agenda bilateral" teniendo en cuenta "que es nuestro principal
socio estratégico comercial".
Kicillof, por su parte, señaló que
la reunión "responde a una agenda permanente que el gobierno argentino
tiene con el gobierno amigo de Brasil, que es nuestro principal socio
comercial".
"Es una agenda muy nutrida, tiene temas vinculados a
la inversión, al comercio, a la integración productiva, la verdad que lo
que vamos a reafirmar como siempre es la idea de que el Mercosur no es
simplemente una unión aduanera, sino un proyecto de integración regional
y entre ambas naciones esa integración en el marco industrial y
productivo es un hecho", dijo el ministro.
"Hay muchas industrias
que trabajan a un lado y otro de la frontera entre Argentina y Brasil,
están tremendamente interconectadas ambas economías, por lo tanto todo
el tiempo intentamos impulsar desde los dos lados una agenda de temas
que abarca las cuestiones más variadas", resumió el titular del Palacio
de Hacienda.