Desde algunos sectores hablan de “falsas dicotomías entre campo e
industria, entre mercado interno y exportación, entre crecimiento e
inclusión; tienen una intencionalidad oculta, en este tipo de discursos
después viene la política de desindustrialización y ajuste”, aseguró.
El
titular del Palacio de Hacienda aseguró que "no hay ningún país
emergente que haya tenido un proceso espontáneo de industrialización sin
una fuerte participación del Estado", y afirmó que "esto es un hecho".
Remarcó que "no hay industrialización en países emergentes sin una participación determinante del Estado".
Así sostuvo que "Argentina no tendría industria sin Estado", y añadió que "el tejido productivo no existiría"
Puntualizó
que "algunas industrias son consecuencia directa de inversiones del
Estado", y subrayó que "las ideas liberales de mucho mercado y poco
Estado fueron las que destruyeron a la industria desde mediados de los
`70".
Pero indicó que "también fue el Estado, con políticas
destinadas a desestimular la acumulación productiva que había tenido la
Argentina durante décadas".
"Así como el Estado tuvo un rol
determinante en la industrialización argentina, y nadie lo puede
discutir, la desindustriailzación fue una política de Estado", advirtió
Kicillof.