"Hoy hay que debatir qué piensan hacer con el Estado lo que pretenden
llegar a la presidencia, qué vamos a hacer con las relaciones
internacionales, con la deuda. Estas cosas son precisamente las ideas
que nos unen con los compatriotas de boinas blancas y banderas blancas y
rojas.
Se es presidente sintiendo que se está cumpliendo con el
compromiso de los que te votaron. A veces se habla de la legalidad pero
poco de la legitimidad. La legitimidad de un gobierno es decir lo que va
a hacer y después cumplirlo.
Tras ese 22% conseguido en las
elecciones de 2003 que le dio la legalidad, Néstor Kirchner pudo
construir a partir de sus políticas una legitimidad popular; y nosotros
luego sostuvimos en las dos presidencias esa legitimidad en la gestión.
Esto creo que es lo central para un militante político."