Durante una disertación en la Universidad de Palermo, organizada por la
Cámara Industrial de la Indumentaria, Oliveto recordó que la mitad de la
población se ubicaba en la clase “baja” tras el quiebre de la
convertibilidad, mientras 20% pertenecía a la clase “media baja”.
Por
el aumento del empleo y el salto del Producto Interno Bruto, en la
actualidad sólo 14,7% de los consumidores pertenece al estrato bajo (con
ingresos familiares mensuales de 3.950 pesos), y 32% al medio bajo
(8.500 pesos por mes), agregó el analista.
Según Oliveto, el
proceso de mejora de los últimos años alcanzó a los segmentos más
favorecidos, y hoy el 18% de los consumidores pertenece a la clase
“media alta”, con ingresos familiares superiores a 34 mil pesos
mensuales.
Mientras, en el tope de la escala, la clase “alta”,
con más de 107.500 pesos de ingreso familiar por mes, agrupa al 5,1% de
los consumidores.
El consultor resaltó el repunte en los índices
de confianza del consumidor en lo que va de 2015, luego de la retracción
sufrida durante el año pasado.
Sostuvo después que el nivel de
incremento de salarios, situado este año en torno del 30% promedio,
supera la inflación prevista (de 25%, según distintos cálculos), “lo
cual implica que se recupera lo perdido en 2014”.
En materia de
perspectivas, Oliveto atribuyó mayores perspectivas a una “política
gradualista, en vez de una de shock”, lo que implicaría una inflación en
descenso pero “en altos niveles por dos o tres años”.
“La chance
de un ajuste ortodoxo es compleja, porque la población espera no perder
lo recuperado, mantener su calidad de vida y su condición de clase, y
hacer rendir su poder adquisitivo”, concluyó el experto.