Que en la administración kirchnerista el sentido fue tener "unas
fuerzas fuertemente subordinadas al poder político; una conducción civil
donde los funcionarios del Ministerio de Defensa ejerzan por delegación
de la presidencia la totalidad de los aspectos que hagan a las
decisiones políticas".
Luego agrega que, a partir de la recuperación
de las democracias en América Latina, hay un debate sobre la relación
entre el poder político y la estructura de las fuerzas armadas; debate
que en Argentina se saldó hacia una fuerte conducción civil de la
política de defensa.
Y Rossi recuerda lo que la historia nos
recuerda, acerca del concepto del rol del ministro de defensa, que antes
era un representante de las fuerzas armadas ante el presidente y pasó a
ser exactamente al reves; un delegado del gobierno en las fuezas,
ejerciendo el poder político de las decisiones.