En los argumentos, el Gobierno sostiene que la aplicación de "tasas de
interés en determinados contextos macroeconómicos arrojan resultados
desproporcionados que desnaturalizan el carácter del sistema de
protección contra riesgos del trabajo". Agrega que la utilización de la
tasa activa del Banco Nación provoca "incrementos desmedidos" de las
indemnizaciones. La norma mantiene la aplicación de la tasa activa del
BNA en el caso de que las aseguradoras incurran en el incumplimiento del
pago.
La Casa Rosada sostiene además que la aplicación de la actual
tasa "compromete la estabilidad y continuidad" de las aseguradoras "en
beneficio de los trabajadores". "Actualmente el rendimiento financiero
de los activos de la industria aseguradora es del orden del 42%
promedio, mientras que la tasa de interés vigente para las
indemnizaciones (...) asciende a niveles cercanos al 90%", se argumenta
en el decreto.
"El ajuste de las obligaciones de las aseguradoras
mediante la aplicación de tasas financieras ha llevado a desnaturalizar
los derechos de los trabajadores beneficiarios del sistema", sostiene el
gobierno, que agrega que las indemnizaciones generan "rendimientos
financieros disociados del daño a reparar".