Este lunes 7 de marzo, los activos financieros argentinos comienzan la jornada en rojo, reflejando la preocupación global por el endurecimiento arancelario de Washington y la dura respuesta de Pekín, que anunció un impuesto del 34% a las importaciones estadounidenses desde el 10 de abril. El golpe alcanza también al sector bancario. El BBVA Argentina cae un 5,63%, mientras que el Banco Macro (BMA) pierde un 4,13%. En tanto, Cresud retrocede un 5% y Despegar un 4,3%. Dentro de las grandes tecnológicas, Mercado Libre muestra una baja más moderada, inferior al 4%, y Tenaris desciende 2,7%. La presión vendedora se extiende a los bonos soberanos en dólares: el Global 2029 pierde 1,24% y el Global 2030, 1,65%. Las bajas más fuertes se concentran en los tramos largos de la curva: el Global 2041 retrocede 2,55% y el Global 2046, 2,52%. En medio de este contexto, crece la inquietud por la apertura del mercado local, especialmente por el posible impacto en las reservas del Banco Central si el Gobierno se ve obligado a intervenir para evitar una escalada del tipo de cambio. El panorama externo no ayuda: el índice Nikkei de Japón se desplomó más de 7% y los futuros de Wall Street anticipan un lunes difícil. El Dow Jones cae 1.400 puntos (–3,7%), el S&P 500 pierde 4,3% y el Nasdaq retrocede 5,4%.