
"Esta observación que hemos hecho acerca de Paraguay no es una 
calificación caprichosa. Queremos dejar en claro que hay muchísimos 
hermanos de Paraguay que viven y trabajan en nuestro país hace años, 
como en toda la comunidad sudamericana", aseguró la Presidenta.
En este sentido, Cristina Fernández de Kirchner, dijo que "es posición 
argentina no adoptar ninguna sanción económica que perjudique al pueblo 
paraguayo" y precisó: "Todos los pueblos de la (Comunidad de Estados 
Latinoamericanos y Caribeños) Celac hemos condenado las sanciones 
económicas. No creemos en esas sanciones porque nunca la pagan los 
gobiernos, siempre la pagan los pueblos".
La Presidenta argentina definió al proceso judicial al que fue sometido 
el ex jefe de Estado paraguayo, Fernando Lugo, como "una parodia de 
juicio político" y que "no hay juicio en el mundo que dure dos horas y 
que no tenga posibilidad de defensa".
La primera mandataria recordó, a modo de ejemplo, el juicio político a 
jueces de la Corte Suprema de Justicia en 2003, que duró meses, y por el
 que terminó destituído Eduardo Moliné O'Connor.
Golpes blandos
Cristina Fernández de Kirchner aseguró que hoy por la tarde la Unión de 
Estados Suramericanos (Unasur) sesionará acerca de la situación de 
Paraguay y recordó que el organismo trató temas similares frente a los 
intentos destituyentes en Ecuador y en Bolivia.
"La Unasur no reúne a jefes de Estado que están todos de acuerdo. Somos 
mandatarios que pensamos diferentes. Lo más valioso es que frente a 
situaciones que comprometen el orden democrático hemos reaccionado de 
igual forma. Como decía (el escritor Jorge Luis) Borges: 'por ahí no nos
 una a todos el amor, pero si nos une a todos el espanto'", indicó.
La Presidenta precisó: "Lo que nos mueve hoy a reunirnos y a someternos a
 discusión no es sólo una actitud de legalidad, que es muy importante. 
La legalidad y legitimidad, están unidas a la estabilidad".
La jefa del Estado destacó la importancia de mantener a la región unida y
 mancomunada. "Creo que va a ser una reunión histórica, en la que 
veremos si somos capaces de seguir sosteniendo la legalidad y la 
legitimidad, y que no se instalen los golpes suaves, que bajo la patina 
de legalidad se produce el resquebrajamiento de la institucionalidad", 
concluyó la primera mandataria.

